LA TELEVISIÓN; ¿Educa?

En mis prácticas realizadas en la escuela nº 27 “Damas Patricias”. Vivencié muchas veces relatos por parte de los niños acerca de la televisión.  En los recreos, nos comentaban que se habían acostado tarde por mirar programas televisivos, como “Graduados”.

Si hay algo que tengo que resaltar es que todos los niños tenían al menos un televisor en la casa del cual hacía uso la mayor parte del día. Nos contaban que desde que se levantaban hasta que se iban a dormir miraban la tele.

“Mirando a la televisión y los demás medios de comunicación y tecnologías informacionales desde un país latinoamericano, es la televisión el medio que ha conquistado la mayor popularidad y el único que tiene una inserción social de casi el 100% en las sociedades contemporáneas.” (Guillermo Orozco Gómez).

Siguiendo la postura de Orozco, Nosotros al ver que todos los niños tenían un mismo interés en algo “LA TELEVESÍON” decidimos pasar varios videos para las clases que teníamos que dar. Lo que resulto muy reconfortante, porque los chicos se apropiaron rápidamente del conocimiento. No les costó entender los temas expuesto en el film. Por el contrario, les llamo tanto la atención que el uso de esta herramienta propicio un buen manejo del contenido y aprendizaje por parte de los niños.

“Estamos ante un nuevo modo y otros lenguajes de realizar el conocimiento. Un modo que además de enfatizar la exploración y el descubrimiento, enfatiza por igual la experiencia lúdica de los sujetos educandos. Ya no se trata de “sufrir” al educarse… se trata de disfrutar mientras se aprende y más aun, aprender bajo la condición de que hacerlo resulte placentero para el sujeto”  (Guillermo Orozco Gómez)

Es claro que los medios amplían notablemente nuestra capacidad de acceder a informaciones de muy diversa índole sobre lugares cercanos o remotos y satisfacen esa necesidad de información.

Criticar al medio televisivo es fácil, sin embargo con frecuencia nos olvidamos de que la televisión es un instrumento; un instrumento poderoso, pero instrumento al fin. Si no sería un elemento del cual los docentes podemos hacer uso al máximo; ¿por qué los chicos mostraron tanto interés al ver los videos?, ¿por qué luego del film los niños quedaron enganchados y respondieron activamente a las preguntas?... quizás todas esta preguntas se resuelven con el simple hecho de mirar y explorar sus biografías. Si ellos pasan largas horas frente al televisor, (como nos contaban) por qué no enseñar en base a sus intereses y también necesidades.

Es por ello que en vez de juzgar o criticar a la televisión seria más propicio incluirlo en la escuela, ya que, como dice Barbero; El espacio ya no es más lineal. Las redes son la negación de la linealidad y que dentro del proceso globalizador los espacios nacionales no van a desaparecer pero se van a reconfigurar. Siguiendo esta corriente es imprescindible comenzar por el lugar que atrapa a los niños “LA TELE”.

Sabemos que los niños actúan en consecuencia según lo que observan, lo que ven en televisión. Hoy en día la mayoría de los niños pasan largas horas frente a la tv y es por esto que  se ha dicho que es la “caja boba”, es decir, se pone la televisión como algo malo que no educa.

 PERO NO SIEMPRE RESULTA ASÍ

Hoy en día hay muchos canales televisivos que enseñan a los chicos valores, modales y hasta inclusive a hablar con propiedad. Como también se encuentran programas para pasar en familia. Con esto no estoy defendiendo por completo a la tv. Pero si cabe resaltar que uno tiene el poder del control y poder elegir y decidir que mirar y que no. Lo mismo sucede con los padres, ellos deben tener el control de lo que sus hijos miran.Si bien no podemos dejar de lado como los medios de comunicación hacen uso y abuso de la información es de gran interés Lo que el ciudadano de hoy le pide al sistema educativo. Como resalta Martin Barbero; “lo que debemos hacer en las escuelas es capacitar al ciudadano  para que pueda tener acceso a la multiplicidad de escrituras, de lenguajes y discursos en los que se producen las decisiones que lo afectan ya sea en el plano laboral o familiar, en el político y el económico. Y para ello el ciudadano debería poder distinguir entre un noticiero independiente y confiable y un noticiero ventrílocuo de un partido o un grupo económico, entre una telenovela que conecta con el país innovando en el lenguaje y en los temas y una repetitiva y facilona. Y para ello necesitamos una escuela en la que aprender a leer signifique aprender a distinguir, a discriminar, a valorar y escoger dónde y cómo se fortalecen los prejuicios o se renuevan las concepciones que tenemos de la política y de la familia, de la cultura y de la sexualidad. Necesitamos una educación que no deje a los ciudadanos inermes frente a las poderosas estratagemas de que hoy disponen los medios para camuflar sus intereses y disfrazarlos de opinión pública”. Es por ello que la formación docente debe estar sustentada en la nuevas tecnologías para poder estar capacitados a la hora de dar clases y poder adaptarnos a las necesidades de los niños y mismo de la sociedad. No podemos hacer oídos sordos del mundo tecnológico en el que estamos inmersos, por tanto debemos estar preparados para poder formar sujetos críticos y responsables a la hora de manipular los medios de comunicación.